5 de julio de 2008

No sé qué es peor.
Si haberme transformado en el recurso literario depresivo y patético del ex pololo que se jura en lost weekend o que eso me afecte.
Creo que opción b es la respuesta. Me da lata, me da pena.
Pero al menos hay honestidad: por fin vuelve a ser la persona que conocí. The Real. Ese que no sabe que la felicidad no es pretender ser cool escuchando bandas cool.depre.indie en lugares under al peo. Ah, pero no, claro: no vale hablar de felicidad porque es un imposible.
Ese que cree que ser resentido y victimizarse frente a la vida que le tocó vivir es la manera honesta y transparente de pasar los días.Tratar de justificar una forma de ser estoy-siempre-cagado-y-estresado-y-así-me-torturo-lo-suficiente-pa-justificar-el-ravotril, con la cómoda constante de nunca terminar las cosas con un derrotado y barato "debí haberme salido de esto hace tiempo".
Qué agotador.
Qué pena.
Qué mierda.
No es cool estar mal.
No es ondero hacerse la víctima.
Y, sobre todo, nunca quise hacerte daño.
La vida está lejos de parecerse a una ex polola que te partió el corazón.
Lo digo con toda la rabia de mi guata y el cariño que te tengo. Deja de actuar como un perdedor cool. Eso no existe.
Y, sin desmerecer tu pena, no olvides que a mí también me ha dolido.